La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha defendido hoy la designación como alcalde del candidato más votado y ha advertido de que cuando en un municipio "no gobierna el más votado, no gobierna nadie".

"Alcalde tiene, pero gobierno no", ha asegurado la vicepresidenta en su intervención en la Escuela de Verano del PP y en la que ha mostrado la disposición del PP a debatir con otros partidos la fórmula que haga posible esa elección de la persona más votada.

La vicepresidenta ha subrayado el plus de confianza ciudadana por el que son elegidos los alcaldes más allá del partido político al que pertenezcan y ha considerado que eso hace más incomprensible el discurso de quienes no quieren que gobierne el que gane y apoyan pactos de los perdedores para lograr la alcaldía.

"Podemos discutir la fórmula y estamos abiertos al debate y al diálogo", ha señalado la vicepresidenta, quien ha instado a que sean los responsables electorales de los partidos los que puedan debatir sobre el mecanismo para ello.

Pero ha insistido en que lo importante es la filosofía para hacer posible que se respete la voluntad de los ciudadanos y se fortalezca el vínculo entre el representante y el representado.

Que no sea elegida la persona más votada ha considerado que es una quiebra del sistema, al tiempo que ha insistido en que cuando hay un alcalde designado por un acuerdo de los partidos perdedores, "se pasan cuatro años y la ciudad, lejos de avanzar, retrocede".