Pedro Sánchez inicia este lunes con Pablo Casado la ronda de contactos para analizar la situación política tras las elecciones generales. Debilitado tras perder más de la mitad de los escaños el 28-A (el PP cayó de 137 diputados a 66), Casado llegará a la Moncloa poco antes de la una de la tarde "dispuesto a escuchar" al jefe del Ejecutivo y a tenderle la mano para "evitar que los independentistas sigan avanzando en su objetivo de ruptura constitucional", informaron fuentes de su equipo.

El PP ha perdido la mayoría absoluta en el Senado, una Cámara clave para la aplicación de un posible 155, pero el dirigente conservador desea mostrar su respaldo a cualquier iniciativa que pueda tomar Sánchez contra el soberanismo en Cataluña, donde el PP considera que son necesarias medidas urgentes para "garantizar la convivencia" y también contra las formaciones que "alienten la violencia".

Casado exigirá al secretario general del PSOE, vencedor de las generales con 123 parlamentarios, que no lleve a cabo la subida de impuestos anunciada ante los datos que, en su opinión, avalan el estancamiento económico de España.

El líder de los populares, añaden fuentes de la dirección, quiere dejar claro a Sánchez (y a Albert Rivera) que, pese a que Ciudadanos se ha quedado a solo nueve escaños (57), el PP es el "partido líder de la oposición" y la ejercerá de forma "firme y constante" durante toda la legislatura.

UNA "SECTA IDEOLÓGICA"

El sucesor de Mariano Rajoy llega a la cita tras ver su nombre en un artículo en el prestigioso semanario británico 'The Economist', biblia del neoliberalismo, en el que se augura su dimisión "forzada" si no consigue unos resultados aceptables en las elecciones municipales, autonómicas y europeas del 26 de mayo. La revista señala que Casado eligió transformar un partido "amplio" como el PP en "una secta ideológica".

Sánchez convocó la semana pasada a Casado, Rivera y Pablo Iglesias (42 escaños) a esta ronda para saber qué apoyos puede tener cara a su investidura. El turno del dirigente naranja será el martes por la mañana y el del líder morado, ese día por la tarde. Por estricto orden de peso parlamentario. Sin guiños a Podemos.

Por ahora, fuera de ese diálogo se han quedado Vox, ERC y el resto de fuerzas que han obtenido representación en el Congreso.