Pedro Sánchez no ha querido esperar ni siquiera a tener el visto bueno de la ejecutiva socialista. A primera hora de la mañana, ha dado la orden de registrar la moción de censura. El motivo, según fuentes socialistas, se encuentra en el temor del secretario general a que el presidente, Mariano Rajoy, decidiese disolver las Cámaras y anticipar elecciones, tras la sentencia sobre el 'caso Gürtel', que concluye que el PP formó parte de un "auténtico y eficaz sistema de corrupción institucional”. Frente a esta situación, Sánchez ha defendido un “gobierno del PSOE”, apelando al respaldo de todos los diputados, incluidos los independentistas, una posibilidad a la que el secretario general se había negado hasta ahora.

Según el artículo 115.2 de la Constitución, el jefe del Ejecutivo no podrá convocar comicios "cuando esté en trámite la moción de censura".

Dos páginas y media

En el texto de la moción, de apenas dos páginas y media, los socialistas recogen las frases más contundentes de la sentencia y señalan que Rajoy "ha eludido cualquier tipo de responsabilidad política relacionada con este caso desde su inicio". A juicio del PSOE, la sentencia "pone de relieve una clara dejación política de sus responsabilidades".

Sánchez ha sido más extenso durante su comparecencia, en la que solo ha aceptado dos preguntas. El líder socialista ha apelado a todos los diputados que apoyen su candidatura, también a los independentistas, pero ha dejado claro que “defenderá la integridad territorial” de España. Si prospera la moción de censura, su gobierno será “del PSOE”, sin integrantes de otras formaciones. Convocará elecciones "cuanto antes", pero primero quiere “regenerar, recuperar la normalidad y atender las urgencias sociales del país”. Sánchez no ha concretado ningún plazo para esta empresa, abriendo la puerta a permanecer en la Moncloa durante los dos años que le quedan a la legislatura.

El líder del PSOE, que ha contactado esta mañana con Felipe VI para comunicarle que iba a presentar la moción de censura, ha justificado así su intención de apoyarse en ERC y el PDECat, cuyos escaños son imprescindibles si Ciudadanos decide no respaldar a Sánchez: “Vivimos en una democracia parlamentaria. La presidenta del Congreso ha sido elegida con los votos de formaciones independentistas. Los Presupuestos fueron apoyados por formaciones nacionalistas. Me dirijo a todos los diputados para que saquemos a España del lodazal de la corrupción. El Gobierno defenderá la integridad territorial”.

Frente a la posición de Ciudadanos, que ha pedido una “moción de censura instrumental” para convocar elecciones si Rajoy no da ese paso por sí mismo, Sánchez ha contestado que eso implicaría desvirtuar este instrumento. “Hay que recordarle al señor Rivera, como al resto de formaciones, que las mociones de censura están tasadas y son constructivas. Son para darle un gobierno al país. Nosotros convocaremos elecciones cuanto antes, pero antes de esto habrá que regenerar, recuperar la normalidad política, atender a las urgencias sociales”.

Recuperar la dignidad

La moción de censura, ha dicho el líder socialista, pretende “recuperar la dignidad, las reglas del juego y defender nuestra Constitución”. Con ella, ha continuado, se sacará "la política de esta novela negra de corrupción y volver a hablar de lo que le importa a la ciudadanía”.

“La moción de censura es constructiva, es para garantizar la gobernabilidad de este país, para constituir y formar un gobierno con fundamentos sólidos y una hoja de ruta clara. Será para constituir un Gobierno del PSOE. Repito: un Gobierno del PSOE. Un gobierno para una agenda social, un gobierno que cumplirá y hará cumplir la Constitución española: garantizaremos el cumplimiento de nuestro ordenamiento. Será un Gobierno que cumplirá con los compromisos de la UE, con una hoja de ruta clara. Será un Gobierno que convoque elecciones, pero antes hay que recuperar la estabilidad, la normalidad, limpiar las instituciones y atender las urgencias sociales”, ha dicho.

Las prisas

Las prisas del líder socialista, sin embargo, han provocado cierto malestar en varios miembros de la ejecutiva. En la reunión del organismo, que ha comenzado a las 11 de la mañana, se han escuchado críticas, según fuentes presentes en el encuentro. "Hemos pasado de consultar a las bases a no consultar ni a la ejecutiva", ha señalado un miembro del organismo, que también ha subrayado que comparte la decisión, pero no las formas.

Sánchez también ha convocado un comité federal para ratificar la iniciativa ya presentada. Será el próximo lunes a las cinco de la tarde.