La primera sesión de control al Gobierno ha llevado al Congreso los primeros mítines ante las elecciones anticipadas convocadas en Madrid. El máximo dirigente del PP, Pablo Casado, ha acusado a Pedro Sánchez de "conspirar" para intentar tumbar los gobiernos de Murcia, Castilla y León y Madrid y ha soltado la palabra propagandística por antonomasia de la campaña de Isabel Díaz Ayuso: "Libertad".

"El 4 de mayo será la primera etapa de unión de todo el centro-derecha y de los votantes avergonzados por la deriva radical a la que usted lleva a España", ha proclamado con pulla incluida a Ciudadanos, una formación que quiere laminar captando a altos cargos. Con este gesto, Casado ha anudado su liderazgo al de la presidenta de la Comunidad de Madrid. La última vez que se implicó al máximo en una campaña electoral fue en Cataluña, donde el PP se hundió hasta los tres diputados y Vox sacó 11.

Sánchez ha lamentado que el líder del PP haya iniciado "la campaña" y haya soltado "un mitin", pero ha entrado y le ha soltado que, después de atraer a "tránsfugas" de Ciudadanos para neutralizar la moción de censura en Murcia, no tiene por qué abandonar la sede de Génova para intentar escapar de la corrupción del pasado. "Ustedes representan continuidad en las malas artes, la falta de respeto a su socio Ciudadanos y el transfuguismo, que es corrupción", ha afirmado. "Representan la peor versión del PP", ha añadido.

La salida de Iglesias

Sobre el anuncio de que Pablo Iglesias abandonará el Ejecutivo para presentarse a las elecciones anticipadas de Madrid, Casado ha lamentado que Sánchez se reparta ministerios con Unidas Podemos. "Lo del escudo social era volver a Vallecas en coche oficial", le ha espetado.