El presidente del tribunal que juzga los amaños cometidos durante la visita del Papa en València en 2006, José Antonio Mora, ha anunciado que el cabecilla de la trama de corrupción conocida como Gürtel, Francisco Correa, había tenido que ser trasladado de urgencia al hospital por un "problema de salud grave", que él mismo ha calificado como "urgencia vital", lo que ha obligado a suspender el juicio.

Aunque todo parezca deberse al coronavirus, lo que ha indispuesto a Correa ha sido una hernia inguinal, según han confirmado fuentes jurídicas, pero su indisposición ha alarmado al tribunal de la Audiencia Nacional que le juzga y ha decidido enviarle al hospital para valorarle, tras comprobar por ellos mismos su estado.

"Debido a ello y a su manifestación de querer declarar ante el tribunal", el juicio se suspendió hasta determinar su estado. La intención de la Sala es que la vista se reanude este jueves a las 10 horas, en un principio, con la declaración del principal acusado, Juan Cotino, el ex presidente de les Cortes Valencianas y el exdirector general de la Policía, quien según Álvaro Pérez, 'el Bigotes', tenía "la última palabra en todo" lo relativo a la visita del pontífice.