El 'major' de los Mossos d’Esquadra, Josep Lluís Trapero, revela en su recurso contra su auto de procesamiento que el día 27 de octubre del 2017, el día en que se proclamó la declaración unilateral de independencia (DUI), remitió un correo electrónico al presidente del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya, Jesús Barrientos, y al fiscal superior de Catalunya, el fallecido José María Romero de Tejada, en el que ponía a su disposición a la policía autonómica "con el fin de dar cumplimiento a las órdenes" que pudieran derivar de la decisión del Parlament, a la vez que comunicaba que el cuerpo policial continuaría garantizando la seguridad ciudadana y el orden público. Trapero está procesado por sedición y organización criminal.

En el escrito de la abogada Olga Tubau sostiene, además, que no es cierto que los Mossos se hayan puesto "al servicio de los intereses secesionistas" y niega que "por mor de esa pretendida connivencia" se hubieran desplegado acciones de vigilancia y contravigilancia a altos cargos del Govern que estaban siendo investigados por un juez de Barcelona por el referéndum del 1-O.

Solo se aceptó la petición de protección "esporádica" del secretario de la Conselleria d'Economia, Josep Maria Jové, "dado el riesgo que podía suponer para dicha persona su exposición pública a raíz de su presencia masiva en los medios de comunicación con motivo de su detención". Se desestimaron completamente otras peticiones (escolta personal, barridos de seguridad), al valorar que Jové tenía la condición de persona investigada en el momento de la petición y que por ello no procedía atender dicha petición dado que ello podía colisionar con las acciones de investigación que sobre él podían estar realizándose, destaca el recurso. La directora de servicios de vicepresidencia, Natalia Garriga, también tuvo vigilancia esporádica.

LA CONSELLERIA Y EL 1-O

Trapero rechaza la acusación de la supuesta pasividad de los Mossos durante la entrada y registro por parte de la Guardia Civil el 20 de septiembre del 2017 en la Conselleria d'Economia y argumenta que estuvo en permanente contacto con los miembros del instituto armado que realizaron dicha operación. Insiste en que la concentración era pacífica y no tumultuaria, como detalla la jueza de la Audiencia Nacional, Carmen Lamela, en el auto de procesamiento. Asimismo, niega que los Mossos tuvieran una actitud pasiva el día del referéndum unilateral del 1-O.