Las acusaciones de la exdirectora gerente de la Hacienda Tributaria de Navarra, Idoia Nieves, que ha asegurado que la consejera de Economía, Lourdes Goicoechea, cometió reiterados intentos de "intromisión" e "injerencias", como pedir información fiscal de determinados contribuyentes navarros, ha generado un seísmo que puede llevarse por delante al Gobierno foral. A la espera de que se constituya hoy una comisión de investigación en el Parlamento navarro, el PSN ya ha anunciado que "echará" a la presidenta, Yolanda Barcina, si se confirman las irregularidades.

La exgerente de la Hacienda Tributaria de Navarra afirmó el martes en sede parlamentaria que su dimisión ha estado motivada por los intentos de "injerencia" de la vicepresidenta foral y consejera de Economía, a quien acusó, entre otras acciones, de pedirle el Plan de Inspección de Hacienda para conocer de antemano si entre los contribuyentes seleccionados había clientes de su asesoría fiscal.

También aseguró que había intentado impedir una actuación que ya estaba prevista y que quiso cambiar la propuesta de revisión del impuesto de sociedades de otro contribuyente.

Tras la contundente intervención de Nieves, cargada de documentación y citando fechas y episodios concretos, todos los partidos navarros han decidido crear una comisión especial de investigación. Aunque algunas formaciones, como Bildu, Aralar-NaBai e Izquierda-Ezkerra, han reclamado directamente las dimisiones de Goicoechea y Barcina.

Moción de censura

Por su parte, el PSN acordó el miércoles dar un plazo de quince días a esa comisión para constatar si las denuncias realizadas son ciertas, lo que para los socialistas "tiene todos los visos". En el caso de comprobarse su veracidad, exigirían la dimisión de Barcina y la convocatoria de elecciones anticipadas. La novedad en este caso, a diferencia de lo sucedido en anteriores escándalos como el cobro de dietas opacas de Caja Navarra, es que los socialistas están dispuestos a presentar una moción de censura "para echar" a la presidenta del Ejecutivo foral.

De confirmarse la iniciativa, sería la segunda moción de censura que se impulsa en esta legislatura tras la ruptura del pacto UPN-PSN, en junio de 2012. La primera, presentada por Bildu y Aralar-NaBai, fue rechazada con los votos en contra de UPN y PPN y la abstención de PSN.

Pero el progresivo deterioro del Gobierno foral ha provocado que, tras este último escándalo, el líder de los socialistas navarros, Roberto Jiménez, se haya decidido a apostar por la creación de un gobierno de transición, que el mismo optaría a presidir como líder de la oposición. Su objetivo sería "auditar, levantar las alfombras, abrir las puertas y ventanas, y sacudir todos los trapos sucios que pueda haber en las arcas forales".

Elecciones en mayo

Ese gobierno buscaría recuperar "la credibilidad malograda" por Barcina, para "poner el contador a cero" y convocar elecciones anticipadas coincidiendo con los comicios europeos del próximo mes de mayo.

Por su parte, Goicoechea manifestó ayer que es "totalmente falso" que se haya beneficiado del cargo para obtener "beneficio personal o profesional" y anunció que va a estudiar acciones legales contra Nieves.En todo caso, remarcó que, tras hablar con la propia Barcina, no tiene pensado presentar su dimisión.

Para las próximas horas se han anunciado movilizaciones de partidos y sindicatos para exigir la dimisión del Ejecutivo foral. Y de igual forma, la Asociación de Usuarios, Consumidores y Contribuyentes Kontuz de Navarra ha anunciado que presentará hoy en el Tribunal Supremo una denuncia contra Goicoechea por el presunto uso de información confidencial de la Hacienda Tributaria.