Iñaki Urdangarin, el único preso varón de la cárcel de Brieva (Ávila), podrá salir de la prisión dos veces por semana para realizar labores de voluntariado social. Se lo permite a partir de este martes el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria 1 de Castilla y León, que ha estimado un recurso presentado por el recluso, condenado por el caso Nóos.

El juzgado ha aprobado la petición de Urdangarín pese a la oposición del ministerio fiscal. El hecho de que salga de prisión, posiblemente por las mañanas de dos días en semana, no implica una modificación de su clasificación penitenciaria, que es de segundo grado.

El Juzgado ha apreciado los argumentos del recluso en el sentido de las ventajas que supondrían abandonar una situación de aislamiento de facto. Por razones de seguridad, y por elección del propio preso, el ex duque de Palma está recluido en una prisión de mujeres, en un ala exclusiva solo ocupada por él.

Desde el 18 de junio de 2018, Urdangarin cumple allí condena en una situación de gran soledad que estaba afectando seriamente a su estado de ánimo, según fuentes penitenciarias, hasta el punto de que había preocupado a quienes el vigilan. La decisión del juez de vigilancia penitenciaria contempla también el riesgo de "desocialización" para el interno.

El juzgado señala que el aislamiento en que vive el preso no es decisión suya, sino una medida de la autoridad penitenciaria. El cuñado del Rey debe cumplir una condena de cinco años y 10 meses por desvío de fondos públicos.