Rafael Vera emplazará a los jueces y fiscales que, según su versión, cobraron de los fondos reservados del Ministerio del Interior a que lo admitan públicamente. El exsecretario de Estado de Seguridad, cuya condena a siete años por sustracción de fondos reservados acaba de ser confirmada por el Tribunal Supremo, hará este llamamiento a los miembros de la judicatura en un comunicado que difundirá justo antes de reingresar en la prisión, según anunció ayer a este diario.

CARTA INTRIGANTE Este es el significado del intrigante párrafo final de una carta de Vera publicada ayer en el diario El País bajo el título A mi familia, a los amigos, a la opinión pública . La misiva, en la que el exsecretario de Estado tilda una vez más de injusta, insostenible e inquisitorial su condena, terminaba así: "Espero la orden de ejecución de la sentencia para tomar una última decisión en este largo y agotador proceso político-jurídico. Han sido 22 años de esfuerzo, de entrega y de sacrificio, y también de errores: esa decisión podría ser uno de ellos".

Vera indicó ayer que "hace años" que tiene preparado el comunicado que leerá antes de volver a la cárcel. "No delataré a nadie; después de tanto tiempo no voy a cambiar de actitud", dijo. "Pero no estoy dispuesto a soportar la infamia de purgar en solitario por algo que mucha otra gente ha hecho, y no gente cualquiera o gente ignorante, sino jueces y fiscales a los que entregué dinero de los fondos reservados para que mejoraran su seguridad, igual que yo dispuse de esos fondos para asuntos relacionados con mi propia seguridad".

Vera alega que nunca los miembros de la judicatura que recibieron dinero de Interior le advirtieron de que, al entregarles esas sumas, estaba incurriendo en una ilegalidad. "Tampoco ninguno de ellos me propuso nunca firmarme un recibo".

El exsecretario de Estado admite implícitamente que las cantidades que cobraron jueces y fiscales eran inferiores a las que se adjudicó él mismo, pero a renglón seguido se pregunta si el delito depende de la cantidad percibida. El tiene clara la respuesta: no. "Ellos sabían perfectamente de dónde procedía el dinero que recibían; si no, ¿por qué no preguntaron nunca, por qué no hicieron constar esos ingresos en la declaración de Hacienda?"

LAVADO DE IMAGEN Vera insiste en que todo el dinero del que se apropió fue destinado a su "seguridad". Asegura que, en este campo, nunca hizo nada que no hubieran hecho sus antecesores ni nada que le hubieran desaconsejado los juristas.

"Ahora, lo único que me importa es lavar el nombre, la imagen de mi familia", concluye Vera mientras espera que se ejecute la orden de reingreso en prisión.