José Luis Rodríguez Zapatero culpó ayer al Gobierno del PP de dejar un agujero de 18.300 millones de euros (casi tres billones y medio de pesetas) a pesar de haber hecho de la estabilidad presupuestaria y el déficit cero sus banderas económicas. La acusación vino a cuento de una pregunta del líder de la oposición, Mariano Rajoy, en la que reprochaba al Ejecutivo socialista "el carrusel" de opiniones económicas de los ministros y conminaba al presidente a no dilapidar "la buena herencia recibida" de los gobiernos de José María Aznar.

Zapatero se aferró al término "herencia" para recordar a Rajoy que el traspaso de poderes había incluido agujeros billonarios en RTVE, Renfe y Aena. Según las cifras del Ejecutivo socialista, la televisión pública acumula 7.200 millones de euros de déficit, la misma cifra que Renfe, y Aena alcanza los 3.900 millones de euros de números rojos.

CARRUSEL DE OPINIONES El presidente dejó la batería de cifras para el final de su respuesta parlamentaria, cuando Rajoy ya no podía replicarle. Antes había oído al líder de la oposición hablar de "preocupante carrusel" de "idas y venidas" de los ministros en materia económica, en referencia a los anuncios de los titulares de algunos departamentos "posteriormente rectificados" por el vicepresidente económico, Pedro Solbes. También había recibido de Rajoy el consejo de liderar "un proyecto económico coherente" para salvaguardar la "buena herencia" del PP.

Zapatero replicó que la verdadera preocupación de su Gobierno estriba precisamente en cómo gestionar la deuda heredada del PP, y cuantificó el agujero que soportan los tres entes públicos citados. "Esas cifras son datos, no opiniones", zanjó el jefe del Gobierno, que prometió acometer la solución a esos problemas en los próximos presupuestos del Estado, de los que se limitó a avanzar que contribuirán a hacer un "modelo de crecimiento económico más eficaz, más transparente, con más desarrollo y más bienestar social".

El jefe del Ejecutivo recordó a su oponente las medidas económicas acometidas por su Gabinete en los dos meses, entre las que destacó el aumento del salario mínimo y el crecimiento del número y la cuantía de las becas a estudiantes e investigadores. Además, aseguró que el Gobierno ha "acordado un escenario de estabilidad presupuestaria para los próximos tres años", en referencia a la ley de estabilidad presupuestaria que se debate hoy en el Congreso.

Para Rajoy, es difícil conocer el modelo económico del Gobierno a causa de las diferencias de criterio de sus ministros. Citó los horarios comerciales, la política de vivienda o la financiación autonómica para criticar "las idas y venidas" de los ministros. Entonces despertó a los hooligans de la bancada conservadora al valerse de una metáfora futbolística apenas dos horas antes del partido de España en la Eurocopa. Rajoy aseguró que Solbes "actúa como un guardameta dedicado a parar los goles que le quieren meter sus ministros". "Da la sensación de que hay dos gobiernos en un solo Gobierno", remató ante los encendidos aplausos de sus incondicionales.

INFLUENCIAS En la misma sesión de control, la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, rechazó la acusación que le hizo el PP de que el Ejecutivo central está condicionado por los acuerdos suscritos por el tripartito en Cataluña. Fernández de la Vega contestó que "la acción" del Gobierno "está exclusivamente condicionada por los compromisos adquiridos con los ciudadanos" por Zapatero.