El portavoz popular en el Congreso, Eduardo Zaplana, se estrenó ayer como comisionado con el objetivo de hacer más llevadera la declaración a José María Aznar. En perfecta sintonía con lo manifestado por el exjefe del Ejecutivo, Zaplana hizo un alegato final en el que reiteró que el Gobierno del Partido Popular "nunca faltó a la verdad ni nunca mintió". Y se felicitó porque "el discurso de ... casi todos los grupos políticos", menos el del PP, "ha variado sustancialmente".
A su juicio, hasta fechas recientes, esos grupos recurrían a las palabras "mentira" y "manipulación" para referirse a la "responsabilidad del Gobierno en aquellas fechas". Ahora, en cambio, hablan de "sesgo y de empecinamiento". En ello quiso ver Zaplana una rectificación.
Asimismo, solicitó de nuevo que se investiguen los vínculos entre el terrorismo islamista y ETA. En su opinión, "se ha construido una tesis" de que la autoría de ETA beneficiaba electoralmente al PP. Esas teorías, aseguró, son "totalmente falsas".
Asimismo, el dirigente popular rechazó que su partido se resista a aceptar el resultado de las elecciones. "Desde el primer día se ha reconocido la legitimidad del Gobierno", dijo, pero la encuesta del CIS evidencia que "fruto del atentado, hubo unos movimientos ... que afectaban a casi tres millones de personas el día electoral".
Zaplana acusó al PSOE de estar acomplejado: "Si cada vez que pedimos que se sepa la verdad se nos dice que estamos poniendo en duda la legitimidad del Gobierno, es que se está ante un complejo importante. Ese complejo ... lo lleva a cuestas quien lo padece".
