Si Zaragoza es la ciudad elegida para la Expo 2008, los visitantes tendrán casi garantizado mucho sol, poca lluvia y suaves temperaturas gracias al microclima de Ranillas. Según la serie estadística de climatología de la capital aragonesa la media de junio a septiembre marcará máximas de 30 grados y habrá sólo 18 días de lluvia en total (seis de ellos en el primer mes y cuatro de media en cada uno de los demás).

Aunque las nubes sólo taparán el cielo durante doce jornadas (cuatro de ellas en junio y septiembre y dos en agosto y julio), los visitantes de la Expo tendrán que protegerse del viento que azotará Zaragoza 23 de los 120 días de la muestra. Las previsiones han calculado incluso la humedad media del ambiente, que rozará el 60% en septiembre y registrará porcentajes de 52%, 48% y 53% en junio, julio y agosto.