La Expo 2008 tiene el éxito asegurado si se celebra finalmente en Zaragoza. Esa es la conclusión del plan de gestión de la candidatura, que contabiliza hasta 34,5 millones de potenciales visitantes que residen o veranean a cinco horas de distancia por carretera de la capital aragonesa.

El documento oficial recoge que casi la mitad de los posibles asistentes a la muestra, más de 16 millones, reside a unas tres horas en coche y dispone de una renta media o alta. "La Expo se beneficiará de una base de visitantes potenciales muy elevada y, además, de unas circunstancias económicas muy favorables. El nivel de renta de sus habitantes está entre los más elevados de España", apunta el informe.

La candidatura incide en que el 40% de los asistentes previstos vive a una hora de la capital aragonesa y acudirá hasta en seis ocasiones al recinto durante los 90 días que permanecerá abierto al público. "Existirá una curva decreciente en el porcentaje de residentes españoles que visitarán la exposición, que se iniciará con una asistencia del 40% de la población a una hora y se reducirá hasta el 1,5% de los residentes en una distancia de hasta cinco horas por carretera", explica.

Pese a la abultada oferta potencial de población residente y turista, la Expo 2008 hace unas estimaciones muy modestas de afluencia, como subraya la propia Oficina Internacional de Exposiciones (BIE), con la única pretensión de no cogerse los dedos en la gestión económica. Así, sólo espera que acudan inicialmente 3,2 millones de personas, que harán cerca de 7,5 millones de visitas.

En los baremos analizados, el número de visitas podría llegar a oscilar entre casi 7 millones en el peor escenario posible y los 8,34 millones de la estimación más positiva. No obstante, tanto los responsables del BIE como la propia candidatura estiman que acudirán muchas más personas. El gerente de la sociedad pública de la Expo 2008, Jerónimo Blasco, espera que se superen los diez millones de visitas.

Sólo con las cifras del 2002, en el área de influencia de la capital aragonesa habría casi 6 millones de turistas extranjeros y otros 3,5 millones de residentes de otras nacionalidades en el 2008. "Por razones de ocio, medios económicos y oportunidad, al turista cabe presumirle un mayor índice de asistencia", recoge el documento.

El estudio cifra entre 1,17 y 1,64 millones el número de extranjeros que podría acceder a la muestra internacional, en su mayor parte turistas. En este sentido, la candidatura no cree que el interés sea igual de "entusiasta" entre los residentes en España.

En estas cifras oficiales no se incluyen los visitantes provenientes de países limítrofes que harán viajes de muy corta duración y que, en la mayoría de los casos, no llegan a pernoctar.

El mayor número de visitantes acudirá en coche o en autobús, aunque también se espera que el ferrocarril sea un medio de transporte masivo con motivo de la Expo 2008. Para entonces, la línea de alta velocidad entre Madrid, Zaragoza y Lérida ya habrá llegado a Barcelona.

Aunque la mayoría del público asistente procederá de un radio de cinco horas de distancia, la candidatura estima que más de un millón de visitas procederá del resto del país: "Las visitas potenciales podrían ser desde una por cada 15 hasta una por cada 10 habitantes, lo que supondría entre 1,06 y 1,60 millones de visitas más".