El tercer trimestre del año se presentaron un total de 43.560 denuncias por violencia machista, lo que supone un incremento del 2,3% respecto al trimestre anterior. Si bien, disminuyó un 0,3% el número de mujeres víctimas, que fue de 40.829.

Ambos son datos positivos, puesto que baja el número de maltratadas y se interponen más denuncias, dado que uno de los principales problemas de esta lacra es que las mujeres sufren en silencio y son reacias a pedir ayuda. El desfase puede deberse a que una misma afectada interponga varias denuncias por diversos episodios de violencia.

Además, aumentó 2,3 puntos el número de sentencias condenatorias. Así, de las 10.741 sentenecias penales dictadas en los tribunales españoles en el tercer trimestre, un 72,16% acabaron con una sanción al agresor.

El mayor porcentaje de condenas se produjo en los juzgados de violencia sobre la mujer, con un 89,4%, seguido de las Audiencias Provinciales, con un 82,1%. Un 55,2% de las sentencias dictadas por los juzgados de lo penal también fueron condenatorias. Todas estas cifras suponen incrementos respecto a las del mismo trimestre del año anterior, destacando los diez puntos de aumento en la cifra de condenas dictadas por las Audiencias Provinciales.