El centro de Zaragoza sabe que día es mañana. Las calles se encuentran abarrotadas de zaragozanos y visitantes que decidieron ayer por la noche disfrutar de los espectáculos o simplemente dar una vuelta. Miles y miles de personas inundaron las calles Alfonso I y Don Jaime dirección a la Plaza del Pilar, donde la virgen aúnn desnuda de flores contemplaba desde lo alto las grandes masificaciones festivas.

La plaza San Bruno en contraposición a la del Pilar ofreció conciertos de grupos folk que convirtieron este espacio a la sombra de de la Seo en una verbena divertida y plurilingüe. Los grupos Bufacalibos, Arag’oc tradfusión y Castanha É Vinòvel animaron e hicieron bailar al público. Incluso alguna jota se escuchó. La plaza del Pilar, al otro lado, reunía a la juventud nerviosa y expectante por el concierto de Kase. O. A los laterales de la plaza, carreteras humanas de indecisos entre las variedades que daba el centro.

Negocios expectantes

Los bares aledaños a los espectáculos aprovecharon que es puente para hacer caja. Aunque Manuel, jefe de un bar en la Plaza San Bruno cree que «el año pasado fue mejor» pero que esperarán al fin de semana.

La música en la calle también animó la agradable noche de ayer, caminar por Paseo Independencia o Alfonso I es esquivar grupos de espectadores a estos músicos que ven en las calles durante las fiestas un escenario.

La noche permitío ayer a los zaragozanos disfrutar del ambiente nocturno festivo sin tener que poner el despertador para madrugar.