Está considerado como uno de los actos que más belleza encierra desde su silencio por el contraste que hacen los faroles con la noche zaragozana a lo largo de todo su recorrido. Fiel a su cita, el Rosario de cristal saldrá otro 13 de octubre a las 18.30 horas en lo que es el acto más antiguo de las Fiestas del Pilar.

La procesión personifica un rosario, en el que las cuentas han sido sustituidas por faroles de cristal. En ella encontramos quince faroles monumentales transportados con carrozas, que son diferentes para cada uno de los misterios además de faroles de mano: 20 para los padrenuestros, 200 para los avemarías, 20 para los glorias, cuatro para las salutaciones y 63 para la Letanía.

Tras salir de la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, el rosario recorrerá la plaza San Pedro Nolasco, Santo Dominguito de Val, San Vicente de Paúl, Coso, plaza España, Alfonso I, plaza del Pilar, Don Jaime I, plaza de la Seo, plaza San Bruno, calle Sepulcro, San Vicente de Paúl, San Lorenzo, San Jorge hasta llegar de nuevo a la calle Pedro Joaquín Soler.

El estreno de dos faroles con imágenes cedidas por Isabel Guerra, la monja pintora, fue la principal novedad del Rosario de cristal del año pasado (acto que se realiza desde el año 1889). Los faroles de la monja pintora forman parte ya de un Rosario de cristal que, compuesto por cerca de 230 faroles carrozas y faroles de mano, forma un conjunto que se valora como patrimonio único al no existir otro igual en el mundo, además de ser de una gran belleza artística. En él, han intervenido, en su diseño, artistas en diferentes épocas, dando lugar a estilos representativos de cada momento, como el arquitecto Ricardo Magdalena que fue quién realizó los bocetos de los diseños de los faroles pertenecientes a todos los misterios establecidos en el siglo XIX.

Es en el 2003 cuando se incorporan nuevos Misterios al rezo del rosario: los luminosos, en esta ocasión se encargó su diseño a la artista Zaragoza Carmen Pérez Ramírez. Posteriormente en el 2016, la misma artista diseñó un nuevo farol carroza que alberga una talla de Santo Domingo de Guzmán.

Dadas las fechas de las fiestas de este año, el Rosario de cristal coincide con el último día de pilares por lo que es posible que se vuelvan a dar imágenes curiosas como que cuando estén en su recta final del recorrido algunas de las carrozas, en la plaza del Pilar se empiecen a escuchar ya las notas del Somos. Ya saben, no siempre es fácil combinar la tradición con las otras actividades del programa.