En un mundo en el que los niños parece que vienen con un móvil o un ordenador portátil debajo del brazo, se podría intuir que no queda sitio para las tradiciones. Pero no siempre es así tal y como demostraron todos los jóvenes participantes de Denominación de Origen. Siete escuelas de jota, todas pertenecientes a la Federación de Folclore Aragonés, Música y Artesanías, pusieron de manifiesto que el futuro de la jota está más que asegurado y, además, brilla con fuerza. Los más pequeños se subieron ayer al escenario instalado en la fuente de Goya de la plaza del Pilar y bailaron y cantaron para un público entregado.
Los primeros en hacerlo fueron el grupo D´Aragón, seguidos por La Fiera y Alma de Aragón. Llegados al mediodía, fue el turno de Templanza Aragonesa, Bravura Aragonesa y, cerrando las actuaciones, de alrededor de treinta minutos cada una, la escuela Reina de la Hispanidad.
Los jóvenes joteros cantaron en solitario y en grupo. Entre actuación y actuación los técnicos de la organización aparecían para retocar el micrófono y ajustarlo a la altura de cada cantante y así asegurarse que el aparato estuviese en la posición correcta para que el público disfrutase del talento de los pequeños.
Los bailes grupales también fueron muy aclamados aunque aparecieron los nervios del directo. Alguna vuelta que otra del revés o los brazos cambiados de paso respecto a los compañeros fueron algunos detalles que se escaparon. Aún con todo, demostraron ser unos auténticos profesionales cuando surgieron contratiempos como que se te desate el cordón de una alpargata, y seas capaz de quitártela, apartarla del escenario, y terminar de bailar la jota a medio calzar. Todo esto sin perder el paso ni perder el ritmo.
Los aficionados a las jotas también tienen su cantera. Entre el público, numerosos niños no quitaban ojo a los protagonistas del escenario y seguían con interés sus cantos y bailes. Familias enteras ocupaban las primeras filas de las sillas instaladas en la plaza del Pilar. Los niños que no tenían asientos cercanos, subidos a hombros de sus padres aplaudían a los joteros cada vez que finalizaban la actuación.
El de ayer fue un adelanto de los eventos que tendrán lugar hoy. A las 10.00 se celebrará el XXXI Certamen Benjamín, infantil y juvenil de jota aragonesa en la sala Mozart del Auditorio. Por la tarde, será el turno de los mayores. A partir de las 17.00 y en el mismo lugar, comenzará el CXXXI Certamen oficial de jota aragonesa.
