17.30 Con una corrida de rejones se pone punto y final al abono pilarista. Están anunciados Andy Cartagena, Diego Ventura y Leonardo Hernández que lidiarán un encierro de Fermín Bohórquez. En tarde de agradable temperatura, a falta de unos minutos la plaza registra apenas media entrada.

18.02 Colaborador el toro de Bohórquez, ante él, Andy Cartagena ha basado su labor más en lo accesorio que en lo fundamental. Alardes y levadas a lomos de Mediterráneo han terminado de calentar un público que ha pedido con fuerza dos orejas debido a la efectividad del rejonazo pero la presidencia, acertadamente, ha dejado el premio en un trofeo. Al final, y con el último empujón de público, la plaza se ha llenazo en torno a la mitad de su aforo.

18.25 El desacierto con el rejón de muerte ha echado por tierra una faena que ha tenido el mérito de enfrentarse a un toro paradísimo de Bohórquez. Ha alcanzado sus momentos de mayor lucimiento a lomos de Nazarí, andándole al toro a dos pistas y de Milagro, un caballo que le llegó muchísimo a la hora de quebrar de dentro a afuera. Con Remate culminó una banderilla corta al violín antes de la debacle final. Al término de su labor se hizo el silencio sólo roto por el clarinazo que indicaba el aviso.

18.47 Académico, realizando el toreo a caballo más puro de los que va de tarde, Leonardo Hernández ha echado por tierra una labor en la que han abundado los cites arrancando desde las tablas para invadir el terreno del toro. Paradísimo como los anteriormente lidiados, se ha puesto imposible a la hora de la suerte suprema. Todo ha quedado en silencio tras escuchar un aviso.

19.10 Andy Cartagena ha recogido el reconocimiento del público saludando una ovación al término de la lidia del cuarto toro. Con casi seis años (los hubiera cumplido en diciembre) ha sido el más manso y reservón de los lidiados hasta el momento y, para mayor desgracia, el benidormí ha estado muy desacertado a la hora del rejón de muerte.

19.32 La plaza de La Misericordia se caía cuando el presidente aguantaba -ya con los dos pañuelos sobre el antepecho del palco- a calibrar la rotundidad de la petición. No era para menos pues Ventura ha culminado una labor completa que comenzaba parando al toro al estilo campero, ayudándose con la garrocha para pisar después terrenos comprometidísimos, dejándose llegar muchísimo al toro. Bien a dos pistas como en los cambios de mano, ha aportado tanto del toreo fundamental como de los alardes. El rejonazo final, de efectos inmediatos, ha puesto en sus manos los máximos trofeos.

19.54 El presidente ha accedido a la petición del público a pesar de que el rejón de muerte ha caído bajo, pero con la tarde lanzada tras el rotundo éxito de Diego Ventura, el público no ha reparado sino en la meritoria labor de un Leonardo Hernández académico y que siempre buscó el toreo puro. Clavando siempre en los terrenos exteriores, ha destacado sobre Venenoso y Xarope en banderillas cortas.