Durante la tarde de ayer se cerró finalmente el programa para las Fiestas del Pilar de este año, donde, una vez más, la opinión de los vecinos y de los peñistas se convierte en un punto muy importante a tener en cuenta para que todo salga a gusto de todos a pesar de las dificultades que esto conlleva.

Las propuestas de un año para otro no dejan de llegar para así intentar solucionar los errores cometidos durante años anteriores. El presidente de la Asociación de vecinos de Arrabal, Rafael Tejedor, explicó la situación que los vecinos de este barrio cercano a la Carpa del Ternasco viven durante los nueve días de fiestas de la capital aragonesa. Ante todo, este barrio exige, un año más, que se mantenga «el espíritu de la carpa del ternasco como un espacio de alimentos y con respeto de los horarios». Tejedor explicó que en el pliego esta petición se había cumplido pero que había que «esperar a la realidad».

Entre los vecinos, los problemas más destacados en este caso son la falta de aparcamientos y el refuerzo del tranvía. Ante esta situación, los vecinos se plantean soluciones como «una zona naranja» que les permita poder aparcar debido a que con la instalación de la carpa pierden «hasta unas 200 plazas».

Otro de los problemas con el que se encuentran estos vecinos es el servicio público. El barrio de la Arrabal se encuentra a la cola de recepción de pasajeros lo que supone «serias dificultades» debido a que cuando llega a la parada de La Chimenea, siempre se encuentra ocupado y sin ningún tipo de espacio para más personas. No es la única zona afectada por esta cuestión. El presidente de la Asociación de Vecinos de Valdespartera, Adolfo Lahoz, explicó que siempre se veían afectados negativamente respecto a la movilidad y que esperaban que se pusieran «dobles composiciones de tranvía y mayores frecuencias».

Valdespartera es una de las zonas más afectadas debido a la concentración de espacios festivos. A finales de este mes, los vecinos se reunirán con el ayuntamiento. «Mínimo queremos los servicios de limpieza y seguridad del año pasado», explicó Lahoz, consciente también de que «todo se puede mejorar año tras año» y con esperanzas de que sean incluso mayores para así conseguir por fin retirar restos de basura que todavía están en el barrio desde las fiestas del año pasado.

PETICIONES

Los peñistas siguen ocupando una gran parte de las quejas, ya que siguen sin tener un espacio a pesar de haber presentado tres propuestas que el ayuntamiento sigue estudiando. Miembros de la Federación de Interpeñas aseguraron que tan solo buscaban «un punto de encuentro para los peñistas» donde poder reunirse con «alguna orquesta, un disc jockey o un tributo» y realizar «actividades infantiles, actos para la gente mayor y con un horario razonable». Tras todas las negativas que han recibido de ayuntamiento a las propuestas presentadas, el miércoles presentaron su última baza, un festival de carácter solidario en el que el beneficio obtenido durante esos días fuera destinado a diferentes oeneges. «Estamos esperando una respuesta y creemos que de aquí al miércoles nos llegará». A pesar de que corren con el tiempo en contra, desde Interpeñas no se dejan de buscar soluciones para poder mantener la cifra de casi 7.000 socios y que no desaparezca ninguna de las 14 peñas que forman esta federación.