La sorpresa tendrá que esperar. La lógica, y con ella el Ros Casares, se impuso al Mann Filter en el primer partido de los cuartos de final por el título, lo que obliga a las zaragozanas a ganar el próximo sábado, en casa (18.30), para forzar un tercer encuentro que, de nuevo, se jugaría en Valencia. La derrota del Mann Filter era previsible, teniendo en cuenta que jugaba en la pista del líder en la Liga regular y que el Ros Casares es el principal candidato a conquistar el título, después de haber engrosado sus vitrinas esta temporada con la Copa y la Supercopa.

Y no es que las chicas que prepara Alex Cebrián no lo intentaran. Hicieron lo posible por poner en apuros al Ros Casares, pero tuvieron pocas opciones de llevarse el partido. Lo máximo que pueden anotar en el apartado positivo es la victoria parcial en el tercer cuarto (18-22), que no fue suficiente para inquietar al cuadro local. Sin embargo, llegaron a los últimos minutos con una desventaja de ocho puntos, que les dio posibilidades de triunfo hasta el final, aunque las probabilidades seguían siendo escasas.

Las locales basaron su juego, sobre todo, en dos jugadoras, la estadounidense Kedra Holland, que tomó las riendas de su equipo y llevó la iniciativa durante todo el encuentro (antes del descanso ya sumaba 14 puntos), y en el potencial anotador de Amaya Valdemoro, con 26 puntos y 6 rebotes. Pero la clave del partido estuvo en el conjunto, en la gran aportación que hicieron todas las jugadoras valencianas a la victoria final, justo lo contrario que en el Mann Filter, donde sólo tres jugadoras pasaron de los diez puntos anotados. Como simple dato, basta observar que el quinteto inicial del Ros consiguió, por sí sólo, más puntos que todo el Filter junto (62).

En los banquillos estuvo otra de las claves del encuentro. El Ros Casares se presentó a la cita con un amplio abanico de jugadoras suplentes, aunque no sacó a todas a la pista. Utilizó a ocho jugadoras que se bastaron para superar a las once que puso en liza Alex Cebrián, todo el arsenal del que disponía. Las valencianas no necesitaron tirar de banquillo, porque su quinteto inicial resolvió el choque, pero el Filter no encontró argumentos suficientes ni de salida ni con los recambios.

Por ejemplo, Piipari jugó siete minutos, en los que sólo capturó un rebote y Wickoff, titular y con 27 minutos sobre la pista, anotó dos puntos y capturó cinco rebotes. Las actuaciones más sobresalientes las aportaron, como de costumbre, Deanna Nolan, que fue la máxima anotadora, con 15 puntos, y la máxima reboteadora, con ocho capturas, Begoña García y Lucila Pascua. Entre ellas sostuvieron a un equipo que vendió cara la derrota, pero que no pudo superar ni a su rival ni a sus propias limitaciones y defectos. Ahora tienen dos días para presentarse con un poco más de contundencia en el partido del Príncipe Felipe e intentar igualar la eliminatoria para seguir soñando con dar la sorpresa al Ros Casares.