El divorcio entre los actores Amber Heard y Johnny Depp tras un año de matrimonio acabó con una declaración conjunta en agosto del 2016, pero antes se trataron en el juzgado acusaciones de malos tratos que hicieron que la protagonista de Rompiendo las reglas interpusiera una orden de alejamiento contra el actor. En el comunicado se aseguraba que ninguna de las partes «había hecho acusaciones para obtener beneficio económico y nunca hubo un intento de daño físico o emocional». Amber Heard dijo entonces que donaría el dinero del divorcio «a la caridad».

Y ha sido ahora cuando se ha confirmado que la cantidad que ella obtuvo, unos siete millones de dólares, se ha destinado a la Unión Americana de Libertades Civiles y al Hospital de Niños de Los Ángeles. El medio E! News ha podido comprobar que la actriz está entre las personas de la lista de honor de dicho hospital, un nombramiento reservado a aquellas personas que hayan donado desinteresadamente entre uno y cinco millones de dólares.