El cantante Alejandro Sanz ha podido vender finalmente su espectacular chalet de Madrid, en la lujosa urbanización La Finca. Según informaba ayer la revista Semana, el flamante propietario es el nuevo fichaje del Real Madrid, Eden Hazard. El cantante pedía por su residencia, de más de 5.000 metros cuadrados, 11 millones de euros.

En la urbanización, la vivienda es conocida como la Black House, la casa negra, porque la fachada es de pizarra negra y cristal. Se trata de una construcción decorada con líneas vanguardistas y minimalista donde Hazard se ha instalado con su mujer, Natascha van Honacker, y sus tres hijos, Yannis, Leo y Samy.

Sanz compró esta mansión cuando residía largas temporadas en Madrid, pero ahora pasa parte de su tiempo en Miami, adonde llegó hace 16 años, y cuando está en España lo hace en su finca extremeña de Jarandilla de la Vera, de 40 hectáreas.

La venta se produce cuando el artista y Raquel Perera acaban de separarse. El pasado 13 de julio lo contaban ellos en sus redes sociales. «Somos una familia y siempre lo seremos. El mundo cambia, nosotros también, siempre amorosamente».

Perera está pasando sus vacaciones en Ibiza con sus dos hijos -Dylan y Alma, de 8 y 5 años, respectivamente- y con Elena Tablada, expareja de David Bisbal.

El cantante prepara su próximo tour, que llama La Gira y que recorrerá varias ciudades de EEUU y de Latinoamérica. El artista también se enfrenta a la reclamación de quien fue su representante durante 25 años, Rosa Lagarrigue, con la que Sanz rompió en el 2016 y que le reclama 9 millones.