El cineasta Pedro Almodóvar y el cantante Raphael ya son oficialmente Hijos Adoptivos de Madrid «por sus extraordinarias trayectorias artísticas», según destacó ayer la alcaldesa, Manuela Carmena, que consideró una «honra para los madrileños» tener como vecinos a los condecorados.

Arropados en el salón de Plenos de la Plaza de la Villa por personalidades del mundo de la cultura, el manchego Almodóvar y el jienense Raphael agradecieron el reconocimiento y firmaron el libro de honor del Ayuntamiento.

La alcaldesa Carmena trasladó el sentimiento unánime de todos los grupos políticos municipales, que en el pleno del pasado febrero acordaron «adoptar» a los dos artistas por su trayectoria artística y su vinculación a Madrid, pese a las dudas mostradas por el PP inicialmente sobre la idoneidad de Almodóvar para recibir esta condecoración.

«Gracias Pedro, por no hacerte un cineasta francés y no irte a vivir a Manhattan. Madrid se rinde ante tu talento y por medio de este Ayuntamiento queremos entregarte este título. Nos honra tener entre nuestros vecinos a un personaje tan ilustre», ensalzó la alcaldesa.

«Tanto yo como mis personajes seguirán viviendo aquí», aseguró el cineasta manchego, que se mudó a Madrid desde Calzada de Calatrava (Ciudad Real) para «salir del pueblo» y «urbanizarse un poco» con la intención de ir después a otro lugar y desde entonces sin darse cuenta «han pasado casi 50 años», explicó.

«Ser hijo adoptivo, una vez que ya tienes esa relación, es como si tu madre atravesara un día sensible y estuviese un poco blandita, y decidiera darte un abrazo y decirte que te quiere», confesó el cineasta, que este verano inicia el rodaje de su próxima película.

Por su parte, Raphael, nacido en Linares, Jaén, en el 1943, ha recordado que llegó a Madrid con 9 meses, y que llevaba deseando «desde hace muchísimos años» este reconocimiento de la ciudad a la que le debe «todas las oportunidades» de su carrera.

«Una vez más, compruebo que los sueños pueden hacerse realidad. Hoy se ha hecho real el que yo sea hijo adoptivo de Madrid. No voy a negar que tengo mucha suerte, que he sido premiado por numerosos países en numerosas ocasiones, pero este de hoy es un premio muy especial y muy deseado por mí desde hace mucho tiempo», dijo el artista que se definió «andaluz, español, europeo y, ahora, hijo adoptivo de Madrid».

Al acto asistieron, entre otros, Natalia Figueroa, Agustín Almodóvar, Penélope Cruz, Marisa Paredes, Carmen Machi, Elena Anaya, Javier Cámara Raúl Arévalo, Alaska y Mario Vaquerizo. También el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera. Con estos dos nombramientos, acordados por unanimidad, ya son 22 las personas que han recibido desde 1980 esta distinción.