Se hacen llamar «Guardianes de la Paz» pero los piratas informáticos que en noviembre atacaron los servidores de Sony están dando guerra y no se vislumbra tregua. Tras acceder a los ordenadores del estudio de Hollywood, los piratas han abierto varios frentes de batalla, revelando alias que usan varios famosos y salarios de actores y directivos, robando guiones y aireando mensajes que nadie pensó que verían la luz.

Una de las últimas revelaciones ha sido un cruce de correos entre la copresidenta de Sony, Amy Pascal, y el productor Scott Rudin, en el que faltan al respeto al presidente, Barack Obama, al que la directiva -donante demócrata- iba a ver en un «estúpido desayuno» organizado por Jeffrey Katzenberg, cofundador de DreamWorks. «¿Debería preguntarle si le gustó 'Django'?», pregunta ella en referencia a la película sobre esclavitud de Quentin Tarantino. Él replica: «'12 años (de esclavitud)'».

Rudin es quien, en otro cruce de correos, llama «mocosa consentida de mínimo talento» a Angelina Jolie, que quería que David Fincher dirigiera su 'Cleopatra', haciendo competencia al 'biopic' sobre Steve Jobs que preparaba el productor.

La esposa de Brad Pitt no es la única atacada, y empleados de Sony también lanzan envenenados dardos contra Tom Cruise, Adam Sandler y Aaron Sorkin, entre otros.

El grupo de piratas parece haber vinculado su ataque a 'The Interview', una comedia protagonizada por James Franco y Seth Rogen en la que son entrenados por la CIA para matar a Kim Jong-Un y que tiene previsto su estreno en Navidad. La película ha provocado críticas del régimen de Corea del Norte, incluso ante la ONU, pero el FBI, que investiga, ha dicho que no hay pruebas de que Pyongyang esté tras el ataque.

Mientras las pesquisas continúan, los piratas siguen sacando trapos sucios o privados. Tom Hanks, por ejemplo, suele registrarse como Harry Lauder o Johhny Madrid, mientras Jessica Alba usa el seudónimo Cash Money. Eso son curiosidades. Peor es la publicación de direcciones o teléfonos, el acceso a 47.000 números de la seguridad social (el identificativo básico en EEUU) o el robo de un guion inédito de Vince Gilligan, el creador de 'Breaking Bad'.