El periodista en general no tiene quien le defienda. El oficio que remata la leyenda de las tres pés (prostitutas, policías y periodistas) sigue siendo de riesgo, al menos en la desconsideración social. ¡Bah, periodistas!, te escupe cualquiera en cuento le confiesas con qué te ganas la vida. Pues eso, pianista en un burdel. O en una comisaría (con piano).

Suerte que contamos con Andreu Buenafuente para defendernos. En la tarjeta del 'showman' figura su capacidad multidisciplinar (cómico, empresario, ilustrador y ¡periodista!) y desde la otra noche podrá añadir la de ‘defensor del oficio de periodista’, y eso que nunca pisó la facultad de Ciencias de la Información por prescripción de sus compañeros de la radio.

¿DE QUÉ NOS DEFENDIÓ BF EN 'LATE MOTIV'?

El psicólogo y autor de libros de autoayuda Rafael Santandreu acudió al programa de Buenafuente para ser entrevistado con las preguntas y las respuestas escritas. “No me había ocurrido nunca en toda mi carrera profesional”, le dijo Andreu a Santandreu en busca de iniciar un diálogo amable.

"¿Sabes por qué es? Porque los periodistas hacen muy malas entrevistas. A veces hacen unas preguntas que uno no quiere responder. Mi pasado de profesor universitario me lleva a darles las preguntas y las respuestas", se justificó Santandreu.

“Confirmamos que eras un profesor repelente”, bromeó el entrevistador antes de dejar a un lado el texto traído por el psicólogo y pasar a preguntarle sin condicionantes.

¿El resultado? Una charla amena, fresca con el remate del ‘showman’: “"Para la próxima, ya sin formulario. Confía en mí, confía en nosotros".

Como Santandreu, son muchos los que no se fían de los periodistas, están en su derecho (de equivocarse), y como Buenafuente son pocos los que dan la cara por defender el oficio. O eso me parece a mí.

PD Rafael Santandreu promocionaba el libro ‘Ser feliz en Alaska’ que, apunta a superventas. O eso es, al menos, lo que sostienen algunos periodistas.