A este paso tendrán que hacerle un retoque en el traje de novio, porque la prensa británica asegura que Enrique de Inglaterra ha perdido entre 4 y 5 kilos en las últimas semanas, con vistas al día de su boda, el próximo sábado 19 de mayo. Aunque entre los preparativos de la celebración y los actos oficiales de su agenda debe andar el hombre un tanto ajetreado, lo cierto es que parece haber sacado tiempo para acudir al gimnasio y fortalecer su cuerpo.

A sus 33 años, el nieto de Isabel II dio un paso importante ya hace meses cuando, por voluntad propia o aconsejado por su prometida Meghan Markle, desterró el tabaco de sus malos hábitos. Meghan, gran amante de la vida sana y el deporte, parece haber sido una figura clave en este sentido. En el 'Daily Mail' fuentes cercanas a la pareja han comentado que los novios se han comprado una batidora de vaso con la que hacen batidos a base de verduras y de frutas y que la quinoa y otros alimentos veganos ha entrado también en la dieta de Enrique, que tenía tendencia a la comida rápida y había sido visto más de una vez en un KFC. "Desde que está con Meghan ya no asalta mi nevera", ha llegado a bromear su hermano Guillermo.

Gimnasio exclusivo y yoga

Enrique de Inglaterra parace que ha reducido también la ingesta de alcohol. Y ha sido visto entrando y saliendo del exclusivo gimnasio KX en el barrio de Chelsea, donde la cuota mensual es de casi 550 euros. Enrique intenta ir de incógnito pero ha sido descubierto vistiendo una gorra de béisbol gris, unos pantalones oscuros de chándal y una chaqueta gris informal. Pippa Middleton y los actores Hugh Grant y Eddie Redmayne también frecuentan este exclusivo centro deportivo. Cuentan también que Meghan también ha contagiado a su prometido su afición por el yoga y que comparten ejercicios. La madre de la prometida del príncipe es maestra de esta disciplina