La exdirectora del canal autonómico valenciano Canal 9, Lola Johnson, ha seguido hoy, en su declaración ante el juez, la misma estrategia de echar balones fuera que el resto de exaltos cargos del ente imputados por las presuntas irregularidades en la gestión de RTVV.

Recibida con gritos de "sinvergüenza" y "Gürtel" por los extrabajadores de la radiotelevisión -parapetados tras la valla de seguridad que ha colocado la Policía Nacional a las puertas del juzgado-, la que fuera también portavoz del Consell de Francisco Camps y secretaria autonómica de comunicación con Alberto Fabra, ha señalado que no tenía más responsabilidad que la de la programación y ha pretendido demostrar que el devenir económico era ajeno a sus competencias. La responsabilidad de asuntos económicos, ha asegurado según fuentes jurídicas, venía "de otros".