La denuncia de los abusos y las agresiones sexuales que ha impregnado diversos ámbitos en los últimos meses bajo la campaña #MeToo ha llegado también al mundo de la moda. Un desfile inspirado en dicha propuesta abrió el viernes la jornada de la Fashion Week de Nueva York.

Así, modelos con alas de ángel desfilaron por la pasarela esposadas a hombres con máscaras de cerdo. La cita la inauguró una modelo con un vestido largo blanco (en la foto), que al final del recorrido se identificó como víctima de una agresión sexual. El modelo con la careta de cerdo simbolizaba a su agresor.

La idea de incluir la campaña #MeToo en la semana de la moda partió de Myriam Chalek, directora de American Wardrobe.

El desfile ha dado cierto impulso a una semana de la moda que parece haber arrinconado el brillo. La pérdida de diseñadores como Alexander Wang, Victoria Beckham, Proenza Schoulder o Delpozo ha hecho saltar algunas alarmas. Custo Barcelona es la única representación española en Nueva York.