Paloma Cuevas no puede más con la presión. Tras su separación de Enrique Ponce y de que ésta se hiciese pública, no hay día en que los medios de comunicación no hablen del tema. Además, el apasionado noviazgo del torero con Ana Soria, de 22 años, se ha convertido en el tema del verano (y va camino de convertirse en el del otoño). La empresaria está muy preocupada por cómo está afectando todo este revuelo todo este revuelo mediático a sus hijas Paloma y Bianca y, al parecer, estaría meditando tomar una drástica decisión.

Y es que según publica hoy la revista 'Hola', Paloma estaría valorando la posibilidad de que sus hijas realicen el curso escolar en el extranjero, alejadas de todo este ruido mediático. Todavía no tiene decidido ningún destino, pero sí tiene claro que será fuera de España, donde nadie les hable de la separación de sus padres ni el romance de su progenitor con una joven estudiante.

DECISIÓN ACORDADA

Por el momento, y según informa la publicación, la 'socialité' ha dejado la finca 'La Cetrina", en Jaen, y se encuentra de nuevo en Madrid con sus hijas. Paloma y Bianca ya han comenzado el curso en el colegio al que llevan asistiendo desde que eran pequeñas y su nuevo inicio en el extranjero no se produciría hasta el año próximo.

Enrique Ponce, con quien Paloma mantiene una buena relación, estaría de acuerdo con esta drástica decisión. Y es que, ante todo, son unos padrazos y no buscan otra cosa que proteger a sus dos hijas de la presión mediática a la que, debido a lo reciente de su separación y al romance del torero con Ana Soria, están sometidos actualmente.