Las familias de los tres periodistas detenidos hace dos semanas en Irán sin cargos, entre ellos el corresponsal del The Washington Post, siguen sin saber donde están ni de qué se les acusa, informaron a Efe varios de sus familiares. "No tenemos ninguna noticia. No sé donde están ni quien les tiene.

No ha habido ninguna llamada de teléfono a familiares o amigos", declaró a Efe por teléfono desde Turquía Mary Rezaian, madre de Jason Rezaian, corresponsal en Teherán de ese diario estadounidense y que tiene nacionalidad iraní y de EEUU. Hace dos semanas, Jason fue detenido junto a su esposa, Yeganeh Salehí, corresponsal del periódico emiratí The National.

El mismo día fueron arrestados una fotógrafa que colaboraba, entre otros medios, con el The Washington Post y su marido, ambos con doble nacionalidad iraní-estadounidense. El esposo fue puesto en libertad hace unos días, pero no ha querido hacer declaraciones ni ha aceptado reunirse con los familiares de los periodistas que continúan detenidos.

La Oficina de Prensa del Ministerio de Orientación Islámica (Ershad), que acredita a los periodistas extranjeros, tampoco facilita información sobre su estado o paradero. La familia de Yeganeh también asegura desconocer donde está su hija, si bien recibió hace dos días una breve llamada telefónica suya a la residencia familiar.

"El domingo por la noche Yeganeh llamó a casa. Con voz temblorosa preguntó qué tal estaba su madre y luego le preguntó si había sido una buena hija para ella", relató un familiar. La joven periodista, de 30 años, pidió a su familia que no se preocupe, aseguró que ella y su marido eran inocentes y dijo que "Jason está bien", antes de que la línea se cortase.

"No sabemos donde los tienen. No tenemos ninguna información de ellos. Mi marido ha dejado su trabajo y lo único que hace es ir al Ershad para ver que podemos conseguir", se lamenta, angustiada, Fateme Talahí, madre de Yeganeh. Ni los juzgados, ni la Policía, ni ninguna de las instituciones oficiales que han contactado ha podido decirles donde están sus parientes y de qué se les acusa.

Según Reporteros Sin Fronteras, Irán tiene en la actualidad 65 periodistas y blogueros detenidos, cinco de ellos extranjeros, la mayoría acusados de delitos como "atentar contra la seguridad nacional", "hacer propaganda contra el Estado", "difundir falsedades" o "perturbar el orden público".