Mientras los portavoces militares de EEUU insisten en que están haciendo todo lo que pueden --ayuda del FBI incluida-- para luchar contra la ola de secuestros de extranjeros en Irak y, por extensión, para garantizar la seguridad en el país, la tozuda realidad demuestra día sí día también que en Irak reina el caos en todas partes. A plena luz del día en pleno centro de Bagdad, un diplomático iraní fue ayer asesinado a tiros en su coche al lado de la Zona Verde, el lugar más protegido de Bagdad al ser el centro neurálgico de las fuerzas ocupantes.

La víctima fue identificada como Jali Naimi, primer secretario de la Embajada de Irán en Bagdad. Según informaron fuentes diplomáticas iranís, Naimi se dirigía con su coche hacia la legación cuando, a la altura del Hotel Al Mansur, tres desconocidos acribillaron el vehículo.

Su muerte coincide con la visita de emisarios iranís que se encuentran en Irak negociando una salida pacífica a la rebelión encabezada por el clérigo radical shií Moktada al Sadr. En una dura nota, el Gobierno de Teherán afirmó que la muerte demuestra la incapacidad de EEUU de garantizar la seguridad en Irak.

CRITICAS A EEUU También tuvo palabras agrias para Washington el Gobierno ruso, que ayer empezó las tareas de evacuación de sus ciudadanos y los de Bielorrusia y Ucrania que han querido abandonar Irak. El Gobierno de Vladimir Putin calificó de "grave error" la invasión de Irak, un error que cada día "está costando más vidas". Transportados en 20 autobuses al aeropuerto de Bagdad, 365 personas volaron hasta Moscú a bordo de los aviones que envió Rusia. Para hoy están previstos tres nuevos vuelos hacia la capital rusa y otro con dirección a Kuwait. En cualquier caso, fuentes diplomáticas rusas informaron de que no está previsto evacuar la embajada en Irak, donde trabajan 37 personas.

Y es que la ola de secuestros ha despertado temor entre los extranjeros presentes en Irak, acentuado por el asesinato de uno de los rehenes italianos. La buena noticia de la liberación de los tres secuestrados japoneses se aguó por el secuestro cerca de Bagdad de otros dos ciudadanos de Japón. Tokio no confirmó la noticia, de la agencia de noticias Kyodo. Según esta agencia, un iraquí que trabaja para una ONG envió un correo electrónico en el que afirma que fue testigo de cómo dos periodistas freelance japoneses fueron capturados en una acción violenta.

La liberación y la captura de estos cinco japoneses coincidió con el primer comunicado emitido por las Brigadas de Muyahidines. El texto, leído en los canales de televisión árabes, dice que los objetivos de los secuestros en Irak son los ciudadanos estadounidenses y los de los países que forman parte de la coalición ocupante de Irak. El comunicado, que fue entregado al periodista francés que fue liberado hace unos días, dice que también son objetivos aquellos extranjeros de países que colaboren con los ocupantes y los que participen en la ocupación.