La familia del sargento Joseph Darby, que fue quien alertó a los investigadores de los abusos cometidos por militares de EEUU a los prisioneros de la cárcel iraquí de Abú Graib, vive bajo custodia debido a las amenazas de muerte que hay contra él.

La esposa de Darby dijo a la ABC que hay muchos vecinos en su comunidad, en Maryland, que dicen que su marido "es hombre muerto". Admitió que es difícil vivir sin intimidad, cuando "siempre tienes a alguien cerca" como protector. Pero cree que su marido tomó la decisión correcta.