Un hombre ha muerto y otras siete personas han resultado heridas, dos de ellas de gravedad, en una serie de apuñalamientos ocurridos la pasada madrugada de este domingo en el centro de la ciudad inglesa de Birmigham, según ha confirmado la Policía, que no vincula los sucesos con el terrorismo. Los investigadores buscan a un sospechoso, como autor de los ataques, que tuvieron lugar en cuatro lugares difeentes de la ciudad. Las víctimas parecen haber sido elegidas al azar, sin que por el momento se pueda determinar el motivo de las agresiones.
En una comparecencia ante la prensa, el superintendente jefe, Steve Graham, de la Policía de West Midlands (en el centro de Inglaterra) indicó que se ha puesto en marcha "una investigación por asesinato" y pidió la ayuda de la ciudadanía. El sospechoso continúa en libertad y se ha reforzado el número de agentes policiales en las calles de Birmingham.
Información a la ciudadanía
"Pedimos urgentemente a todo el que haya visto algo o a cualquiera que tenga filmaciones de cámaras de vigilancia o en su móvil, que se ponga en contacto lo antes posible, porque esa información puede ser crucial para nuestra investigación". Los ataques se habrían prologando a lo largo de dos horas. "Creemos que los incidentes ocurrieron entre las 00.30 y las 02.20 (hora local)", señaló Graham.
Pelea multitudinaria
Previamente, una testigo de los hechos, Cara Curran, ha declarado a BBC Radio Live que se trató de "un grupo de chicos contra otro", que se enfrentaron a puñetazos en una noche de juerga, y ha dicho que oyó "insultos racistas".
La Policía ha calificado lo sucedido de "incidente grave" y, al tiempo que ha llamado a la calma y a estar alerta, mantiene varias calles acordonadas mientras los expertos analizan las escenas del crimen.
Durante una intervención esta mañana en el 'Andrew Marr Show' del canal televisivo BBC One, el ministro de Exteriores, Dominic Raab, ha confirmado que no ha "recibido información" que "vincule los apuñalamientos" con un caso de terrorismo.
Este domingo por la mañana las autoridades han reforzado la vigilancia y han cortado varias calles, mientras que se ha recomendado a la población no acudir por la zona donde han ocurrido los hechos, situada en la parte centro de Birmingham.
Incidentes anteriores
El 20 de junio, tres hombres fueron asesinados con un cuchillo en un parque en Reading, al oeste de Londres y la investigación se confió a la policía antiterrorista. El sospechoso, Khairi Saadallah, un refugiado libio de 25 años que, según su familia, padecía problemas de salud mental debido a la guerra civil en Libia, había sido acusado de tres asesinatos y tres intentos de asesinato. Seis días después, un hombre apuñaló e hirió a seis personas en un hotel que alojaba a refugiados en Glasgow, Escocia, pero el carácter terrorista había sido descartado.
Sin cambios desde noviembre de 2019, el nivel de amenaza terrorista se califica como "significativo" en el Reino Unido, tercero en una escala de cinco.
