La crisis de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en la franja de Gaza vivió ayer otro episodio cuando grupos de milicianos armados incendiaron una comisaria y tomaron un edificio de la Administración local en Zuaida y Jan Yunis. Mientras tanto, el presidente palestino, Yasir Arafat, sorprendió al declarar en Ramala que "no hay crisis" entre él mismo y el primer ministro, Ahmed Qurei.

El primer ataque en Gaza se produjo de madrugada en Zuaida, donde una decena de militantes enmascarados tomaron y quemaron una comisaría. Ningún grupo armado asumió el ataque, que sólo produjo daños materiales. Más grave fue la ocupación durante varias horas de la sede de la Administración local de Jan Yunis. Una veintena de enmascarados armados que decían actuar en nombre de las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa tomaron el edificio y pidieron a Arafat que destituyera a su primo, Musa Arafat, como jefe de la Seguridad General palestina.

COMPROMISO Alrededor del mediodía, los atrincherados abandonaron el edificio después de que, según aseguraron, Arafat se comprometiera a readmitir en la policía a un grupo de activistas de las Brigadas que habían sido despedidos por el pariente del líder palestino. Sin embargo, Musa dijo que no hay milicianos empleados en las fuerzas de seguridad. Por su parte, las Brigadas en Gaza emitieron un comunicado negando su participación en el asalto.

Más contundente fue el texto que emitieron ayer las Brigadas en Yenín, en Cisjordania, en el que afirman, sin dar nombres, que en Gaza hay "colaboracionistas que han fabricado una crisis para cumplir un plan americano-sionista" que pretende acabar con la ANP. Para ello, según el texto, se han adueñado del nombre de las Brigadas, una nebulosa de grupos armados locales que están vinculados a Al Fatah, el movimiento presidido por Arafat.

HABLA ARAFAT Precisamente, el líder palestino efectuó ayer su primera aparición ante la prensa desde el inicio de la crisis. En contra de toda evidencia, el rais negó que haya crisis en la Autoridad Nacional Palestina. "No hay ningún problema respecto al Ministerio de Interior. El Consejo Legislativo ha sugerido unos cambios que han sido aprobados", dijo Arafat, refiriéndose a unas reformas en los servicios de seguridad que aún no han sido aplicadas. Además, Arafat reiteró su "absoluta confianza en Qurei".

Por otra parte, la radio israelí informó ayer de que el presidente francés, Jacques Chirac, ha enviado una carta a su homólogo israelí, Moshe Katsav, en la que da por cerrada la crisis entre los dos países. Esta semana, Chirac dijo que el primer ministro israelí, Ariel Sharon, no era bienvenido en Francia después de unas declaraciones en las que Sharon urgía a los judíos franceses a emigrar a Israel a causa del antisemitismo en Francia.