Bagdad. -- Al menos 20 policías han muerto en ataques contra comisarías de policía en la provincia de Al Anbar, en el oeste de Irak, han informado fuentes policiales y médicas. Los asaltantes los han desarmado y los han matado a sangre fría a tiros.En Bagdad, un artefacto --según las primeras informaciones, un coche bomba-- ha estallado al paso de un convoy estadounidense por la denominada carretera de la muerte, que une la capital con el aeropuerto, han informado testigos, sin detallar si ha causado víctimasA sangre fríaEn un ataque coordinado, hombres armados han asaltado poco después del amanecer las comisarías de las ciudades de Haqlaniyah y Hadiza, a unos 135 kilómetros al noroeste de Bagdad, según la policía.Seis de los agentes han sido sorprendidos por los insurgentes en el centro policial de Haqlaniyah, y poco han podido hacer para defender sus vidas.Responsables médicos citados por cadenas de televisión árabes han cifrado en 23 el número de cadáveres recibidos en el hospital de la zona.Segundo ataque contra fuerzas de seguridad en 24 horasÉste es el segundo ataque en las últimas 24 horas contra centros de seguridad iraquís en la provincia de Al Anbar, plagada de soldados estadounidenses que esperan la orden final para el asalto definitivo a las localidades de Ramadi y Faluya.Ambas ciudades son las más populosas y activas de la citada provincia, corazón de la resistencia iraquí.Ayer, alrededor de 30 personas, entre ellas 17 policías murieron y cerca de 40 resultaron heridas en una serie de ataques coordinados en la zona de Samarra, ciudad ubicada asimismo en el denominado triángulo suní.Miles de soldados estadounidenses están preparados desde hace una semana para intervenir con toda la fuerza y tratar de recuperar el control de las ciudades rebeldes de Faluya y Ramadi.Desde entonces, se repiten casi a diario los asaltos y los combates entre insurgentes y tropas norteamericanas secundadas por fuerzas iraquís.