Un destacado clérigo suní fue asesinado el sábado en Bagdad por unos desconocidos que le dispararon a bocajarro, según informó ayer la Organización de Ulemas Musulmanes de Irak. La víctima, el jeque Tamer Suleiman al Zari, era miembro de dicha organización y hermanastro del secretario general del grupo.

Los asesinos se presentaron en el domicilio de Al Zari, situado junto a la mezquita del imán Shahid Raad, en la que predicaba. El hijo del clérigo abrió la puerta y fue a buscar a su padre. Cuando éste apareció, los desconocidos le dispararon seis veces antes de huir. Al Zari, que resultó malherido, murió horas después en el hospital.

Este nuevo ataque contra un líder religioso ha hecho incrementar los temores de un enfrentamiento entre las distintas comunidades de Irak. EEUU dio a conocer recientemente una carta atribuida a un presunto miembro de Al Qaeda en la que hacía referencia a un plan para provocar una guerra civil en el país.

Refiriéndose al asesinato de Al Zari, el jeque Al Faidhy, portavoz de la citada Organización de Ulemas Musulmanes, vaticinó ayer que "Irak será testigo de más acciones de este tipo de aquí al traspaso de poderes, el próximo 30 de junio".

Una emisora de radio iraquí afirmó ayer que Tarik Feiz al Hasa, sobrino del derrocado líder Sadam Husein, y Rashid Tan Kadem, destacado jefe del disuelto partido Baaz, fueron detenidos cuando trataban de escapar a Siria con pasaportes falsos. La información no fue confirmada por ninguna otra fuente ni por el mando militar de la coalición ocupante. Kadem ocupa el número 49 en la lista de los iraquís más buscados por EEUU.