Un comando de siete hombres armados atacó ayer con lanzagranadas un edificio en Damasco que hace años albergaba la sede de la ONU en el barrio diplomático de Mazeh. Varias explosiones pudieron oírse durante la tarde y, una hora después del inicio de los incidentes, el edificio que perteneció a la sede de Naciones Unidas fue pasto de las llamas, según constató un periodista de France Presse. La televisión Al Manar, vinculada al grupo libanés de Hizbulá, aseguró que las fuerzas de seguridad habían matado a "tres atacantes" y capturado a otro.

"Un grupo terrorista", según dijo una fuente oficial siria bajo el anonimato, lanzó un ataque en el barrio de Mazeh, al oeste. La agencia oficial siria anuló dos informaciones previas en las que había informado de la muerte de tres hombres.

Los atacantes "abrieron fuego de forma indiscriminada en el barrio de Mazeh", dijo una fuente de los servicios de seguridad. "Los servicios de seguridad se han hecho completamente con el control de la situación", añadió la agencia oficial siria.

El barrio alberga numerosas embajadas occidentales y árabes, principalmente la de Canadá, la de Gran Bretaña, y las legaciones de Irán y Arabia Saudí. La embajada española y las viviendas de sus diplomáticos se encuentran fuera de este barrio y, según dijeron a la agencia Efe fuentes diplomáticas, ningún miembro de la colonia española resultó herido por estas explosiones.