Las calles venezolanas están siendo el escenario los últimos días del creciente clima de tensión que se vive en un país en el que a cada hora aumentan las voces que reclaman el final del Gobierno de Nicolás Maduro. En torno a una treintena de protestas callejeras se registraron durante la madrugada de ayer en la capital, Caracas, especialmente en zonas consideradas bastiones del oficialismo. Las movilizaciones se producen la víspera de la jornada que ha convocado el antichavismo en el país sudamericano y en más de 150 ciudades de todo el mundo para denunciar la falta de legitimidad del nuevo mandato presidencial que juró Maduro ante el Tribunal Supremo hace dos semanas.

Al menos una decena de manifestaciones que se iniciaron el lunes por la noche en Caracas se acabaron alargando hasta la madrugada en la capital. No obstante, el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social cifró en 30 las protestas registradas en la capital del país, la mayoría en barriadas del municipio de Libertador, un territorio gobernado por el oficialismo y donde están ubicadas las sedes oficiales.

Por las redes sociales están circulando numerosas fotografías y vídeos que muestran cortes de vías así como a personas en las calles gritando consignas antigubernamentales. Abundan las imágenes que muestran a las fuerzas del orden tratando de disuadir las manifestaciones, en algunos casos disparando gases lacrimógenos en zonas residenciales. Las refriegas han estado acompañadas por la acción de cientos de vecinos que desde sus casas y en varias zonas de Caracas golpean cacerolas, una forma de protesta popular también en Venezuela.

PROTESTAS

El Programa Venezolano de Educación-Acción en Derechos Humanos (Provea) informó, a través de Twitter, del uso de tanquetas de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) en la parroquia El Valle «para intentar sofocar» una protesta. Decenas de manifestantes levantaron barricadas, que mantienen encendidas con desechos y alrededor de las cuales se han congregado para manifestar su rechazo al presidente Maduro, al que la oposición y numerosos países consideran ilegítimo.

Uno de ellos es el Gobierno de EEUU, cuyo vicepresidente, Mike Pence, emitió un mensaje de vídeo de apoyo a los venezolanos en el que les alienta a mantener sus protestas contra Maduro y subraya el respaldo de Washington al líder opositor, Juan Guaido, a la sazón presidente de la Asamblea Nacional. «En nombre del presidente, Donald Trump, y de todo el pueblo estadounidense, permítanme expresar el apoyo inquebrantable de los Estados Unidos mientras el pueblo de Venezuela levanta sus voces en un llamamiento a la libertad», declaró Pence.

También España y la UE están pendientes de la evolución de las protestas. Los ministros de Asuntos Exteriores español y de Francia, Italia, Portugal y los Países Bajos emitieron un comunicado conjunto en el que muestran su «profunda preocupación» por el «deterioro de la situación política y humanitaria» que atraviesa Venezuela, al tiempo que apuestan por la creación de un grupo de contacto internacional que facilite el diálogo entre las partes enfrentadas. La oposición de Venezuela planea realizar hoy marchas en todo el país como parte de un evento anual que marca la caída de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, en 1958. Otras 150 ciudades de todo el mundo secundarán las protestas.