Las autoridades de Australia han explicado este viernes que la búsqueda con radares del avión de Malaysia Airlines desaparecido el pasado 8 de marzo con 239 personas a bordo ha sido infructuosa y han decidido plantear una "estrategia visual" para localizar los posibles restos del aparato localizados en el océano Índico.

"No detectamos ayer (por el jueves) nada con los radares, hemos replanteado la búsqueda de manera visual", ha explicado John Young, portavoz de la Autoridad de Seguridad Marítima de Australia (AMSA), organismo que lidera la búsqueda en el sur del océano Índico. Dos aeronaves con "observadores entrenados" asomados a las ventanillas rastrean una zona del suroeste de Australia que tiene una superficie de 23.000 kilómetros cuadrados. Otros dos aviones se incorporarán a la búsqueda en las próximas horas.

No es tarea fácil, a los condicionantes meteorológicos --viento, corrientes, eventual mala visibilidad-- se le suman dificultades físicas como la amplitud del área de búsqueda; una superficie de 23.000 kilómetros cuadrados en una de las zonas más inhóspitas del planeta, alejada de tierra firme y poco frecuentada por los barcos, en la confluencia de los océanos Índico y Antártico. Esta ubicación hace que los aviones que buscan el vuelo MH370 tengan que hacer turnos de dos horas, ya que necesitan cuatro horas de viaje para llegar al lugar y cuatro horas de vuelta para repostar combustible.

Vuelos a baja altura

Un avión P3 Orion de las Fuerzas Aéreas australianas ya ha regresado a su base después de sobrevolar sin resultados positivos el lugar, ha afirmado Young. "Hasta la fecha, no se ha informado de ningún avistamiento", ha informado la AMSA. Los aviones han podido recorrer la zona a baja altura gracias a las "mejores" condiciones climatológicas de este viernes.

El primer ministro de Australia, Tony Abbott, ha señalado desde Papúa Nueva Guinea, donde se encuentra de viaje oficial, que su país hará "todo lo posible" para encontrar y confirmar si los restos pertenecen al vuelo MH370. "Ahora mismo podrían ser unos contenedores que han caído de un barco, nosotros no sabemos", ha advertido en una nueva llamada a la prudencia.

Se podrían haber hundido

Warren Truss, quien actúa como primer ministro interino de Australia por la ausencia de Abbott en el país, ha apuntado, por su parte, que existe la posibilidad de que los restos se hayan hundido."Algo que lleva flotando en el océano tanto tiempo puede que deje de flotar (...) Y se hunda hasta el fondo del mar", ha destacado.

Las autoridades buscan un objeto de unos 24 metros y otros más pequeños a unos 2.500 kilómetros al suroeste de la ciudad de Perth, que podrían estar vinculados al vuelo malasio. El miércoles un Hércules australiano arrojó boyas que servirán de marcadores para la búsqueda.

A pesar de considerarlo una pista creíble, el ministro australiano de Defensa, David Johnston, ha afirmado que "pasarán muchos días para que se tenga una idea de la credibilidad y veracidad de este informe (del satélite)".