Las autoridades australianas anunciaron este martes que impondrán desde la medianoche del miércoles el confinamiento durante 6 semanas en Melbourne, con cerca de 4,9 millones de habitantes, tras un rebrote de la covid-19.

El primer ministro del estado Victoria, Daniel Andrews, cuya capital es Melbourne, anunció la medida con el objetivo de controlar la expansión de los nuevos contagios, que este martes registraron allí un máximo de 191 casos.

Las autoridades anunciaron la víspera el cierre de las fronteras entre los estados australianos de Victoria y Nueva Gales del Sur, los más poblados del país, por primera vez en 100 años y que entra en vigor esta medianoche.

"Decratamos este confinamiento para evitar una tragedia", avisó Andrews para tratar de concienciar a la población del peligro que corre si no se controla el rebrote.