George Bush autorizó el derribo de un avión procedente de España que se dirigía a Estados Unidos el 11 de septiembre del 2001, según aseguró el jueves la cadena de televisión NBC citando fuentes anónimas, al dar cuenta de las declaraciones del presidente ante la comisión independiente del Congreso que investiga si el Gobierno norteamericano tomó las medidas suficientes para evitar los atentados que tuvieron lugar el 11 de septiembre.

Durante su declaración, Bush dio detalles del caos sembrado por los atentados. Como ejemplo de esa confusión, según la NBC, el presidente explicó el caso del citado avión. Dijo que los funcionarios de la Casa Blanca temían que ese aparato también fuera utilizado como arma terrorista y le pidieron la autorización para derribarlo si creían que era necesario. La televisión no dio más detalles sobre el vuelo.

COMANDO ESTRATEGICO El presidente de EEUU dio la orden de derribarlo cuando llegó a la sede del Comando Estratégico en Omaha (Nebraska). Más tarde se enteró de que el avión había dado la vuelta y, según dijo en la comisión, había vuelto a Madrid.

La comisión del 11-S está investigando si las defensas aéreas de EEUU respondieron con la necesaria rapidez para proteger al país tras los atentados, y cuándo autorizó el presidente que se derribasen aviones de pasajeros como medida defensiva. El presidente estadounidense se encontraba en Florida cuando ocurrieron los ataques y, por razones de seguridad, en lugar de regresar a la Casa Blanca, en Washington, se trasladó primero a la base militar de Louisiana y después, a la de Nebraska.

Una de las medidas inmediatas que Estados Unidos tomó tras los ataques del 11-S fue el cierre de su espacio aéreo, algo que nunca se había hecho en el país. Como consecuencia, numerosos vuelos procedentes de Europa, Asia y América Latina fueron cancelados o tuvieron que dar la vuelta.