En vísperas del segundo y trascendental debate con el aspirante demócrata a la Casa Blanca, John Kerry, el presidente de EEUU, George Bush siguió ayer firme en su postura de que invadir Irak fue una decisión "correcta". Apenas un día después de que el informe del jefe de los inspectores de EEUU en Irak, Charles Duelfer, hiciese añicos su principal argumento para invadir el país árabe, afirmando que Sadam Husein carecía de armas de destrucción masiva, el presidente se mantuvo en sus trece y defendió la guerra de Irak.

"Basándonos en la información que tenemos hoy, creo que hicimos lo correcto" al invadir Irak, recalcó Bush. El presidente encabezó una ofensiva de la Casa Blanca en la que también participó el vicepresidente Richard Cheney, para contrarrestar el daño causado por el informe de Duelfer a sus perspectivas de reelección en noviembre.

CONTRATAQUE "Deben de ser las dos últimas personas en este planeta que no afrontan la realidad sobre Irak", contratacó inmediatamente el demócrata Kerry. "El informe concluyó que las inspecciones y las sanciones funcionaban", ya que "impedían" a Sadam Husein reconstruir los programas de armas prohibidas, recalcó Kerry. Además, denunció a su rival por "dejar de apuntar a los enemigos reales de EEUU, Osama bin Laden y Al Qaeda". El dictador iraquí y el peligro que suponían sus supuestas armas ilegales "fue inflado" por Bush, concluyó.