California está estudiando una ley que obligaría a los camiones de materias peligrosas a adoptar un sistema de satélite GPS parecido al que se estudia para los aviones. En el 2001, un camión de 12 metros que llevaba leche se empotró contra el edificio del Gobierno californiano. Murió el conductor.

Los vehículos tendrían un computador con un mapa de las coordenadas de los lugares a los que no puedan acercarse. Si lo hicieran, el ordenador de a bordo cortaría el suministro de gasolina y accionaría los frenos, sin que el chófer pudiera evitarlo.