La campaña para la segunda vuelta de las elecciones francesas que se se celebran el domingo concluyó el viernes con un vuelco inesperado: con la denuncia de la campaña del favorito, Emmanuel Macron, de un "pirateo masivo" de sus archivos con el fin de "desestabilizar" los comicios. Wikileks niega estar detrás de lel hackeo, bautizado ya como 'Macronleaks' mientras algunos de esos documentos ya han empezado a circular por las redes sociales. La Comisión Electoral ha intervenido este sábado para advertir a los medos de comunicacion que la publicación de estos datos -muchos de los cuáles se cree que son falsos- pude constiuir un "delito penal".

Al filo de la medianoche, En Marche! envió un comunicado enviado a los medios de comunicacion comunicando un "pirateo masivo y coordinado" que ha llevado a la "difusión en las redes sociales de "informaciones internas de diversa naturaleza". Antes, Wikileaks había informado en un tuit del pirateo, asegurando no estar detrás de la operacion y remitieno a otro internauta: EMleaks.

En la nota, En Marche! precisa que los archivos pirateados son como correos electrónicos, documentos contables o contratos que fueron obtenidos hace varias semanas en el 'hackeo' de direcciones de correo personales y profesionales de responsables del movimiento". Junto con esos documentos, los autores del pirateo han hecho circular documentos falsos para "sembrar la duda y la desinformación".

Intento desestabilizador

Para "En Marcha", el robo es "un intento de desestabilizar las elecciones presidenciales", a imagen del que "ya se vio en Estados Unidos en la última campaña" contra la candidata demócrata, Hillary Clinton, que los servicios de inteligencia estadounidenses atribuyen a Rusia. Al igual que con Donald Trump, el presidente ruso, Vladimir Putin, no ocuta sus simpatías por Marine Le Pen, a quien recibió hace unas semanas en Moscú.

Desde cuentas relacionadas con la extrema derecha han empezado a circular ya algunos de esos documentos y el número dos del Frente Nacional (FN), Fliorian Philippot, se preguntaba "si Macroleaks va ahora a divulgar cosas que el periodismo de investigación ha matado". "Aterrador este naufragio democrático" se respondió él mismo en un tuit.

El movimiento de Macron llama a los medios de comunicación a "asumir sus responsabilidades" y a valorar la opertunidad de hacerse eco de "esta operación de desestabilización"."Tomaremos todas las iniciativas necesarias ante los actores públicos y privados para aclarar esta operación inédita en una campaña electoral francesa", señala la nota, que subraya "la gravedad de los hechos" que ponen en peligro "los intereses vitales" de la democracia francesa.

La denuncia de la filtración podría estar relacionada con la insinuación que lanzó Marine Le Pen en el debate que mantuvo en televisión con Macron el jueves sobre la presunta existencia de una cuenta bancaria del candidato centrista en el paraíso fiscal de las Bahamas. El aspirante al Elíseo de En Marche! negó los hechos y ha interpuesto una querella.

El pasado 26 de abril, "En Marcha" confirmó haber sido objeto de al menos cinco ciberataques realizados por "profesionales" y atribuidos al grupo de piratas rusos Pawn Storm por la empresa de seguridad informática Trend Micro. Según la campaña, desde enero venínan sufriendo intentos de robo de datos personales a través del envío de correos electrónicos que tambien pretendían infectar ordenadores.