Tras la estrepitosa caída que sufrió el miércoles en Santa Clara, a 280 kilómetros de La Habana, el presidente cubano, Fidel Castro, fue operado de la rodilla izquierda, fracturada en ocho pedazos. La intervención quirúrgica duró más de tres horas. Castro tiene ahora la pierna enyesada y el brazo en cabestrillo.

Los detalles de la delicada operación fueron dados a conocer por el propio líder en una carta abierta titulada Carta del compañero Fidel a sus compatriotas . Los rotativos del país publicaron el texto en portada.

En la misiva, redactada en tercera persona, el mandatario, que en agosto cumplió 78 años, relata con todo lujo de detalles cómo se produjo la caída al terminar su discurso ante los invitados a la graduación de más de 3.000 instructores de arte, además de los pasos que se dieron después para curarle. "No se puede culpar a nadie" de la caída, decía la nota informativa.

MUCHOS OBSTACULOS En ella, Fidel reconoce que apenas podía moverse. Más adelante, repasó cómo "después de muchos obstáculos, en medio de aquella consternación", el dirigente pudo ser introducido "en la parte trasera del automóvil" y conducido a una casa del Estado, donde se realizó la primera observación.

Más tarde, fue trasladado en ambulancia a la capital con varios médicos. El mensaje sirvió de parte médico. "La rótula estaba fragmentada en ocho pedazos .... De común acuerdo, los especialistas y el paciente decidieron proceder a la inmediata operación de la rodilla y a inmovilizar el brazo derecho con un sencillo cabestrillo", continuó la misiva.

"TRABAJO DE ORFEBRERIA" Agregó que la intervención duró tres horas y 15 minutos, y que el personal sanitario que lo atendió en la "pequeña instalación hospitalaria" del Palacio de la Revolución realizó un "trabajo de orfebrería" para unir los fragmentos de rótula. "El paciente solicitó a los médicos que no le aplicaran ningún sedante y utilizaran anestesia por vía raquídea" para adormecer sólo la parte inferior del cuerpo y evitar la "anestesia general", con el fin de "atender numerosos asuntos de Estado importantes".

El anciano líder concluyó asegurando que evolucionaba "bien" y que no dejará de comunicarse con los cubanos. También agradeció las "pruebas de cariño y solidaridad".

Ayer, los noticiarios de televisión informaron de la caída de Fidel, pero no han vuelto a ofrecer imágenes. Los presentadores de los informativos se limitaron a leer los comunicados, aunque las palabras improvisadas por el jefe del Estado tras el resbalón fueron retransmitidas en directo. Todo el país vivió pendiente de la salud del presidente.