Al menos 49 personas murieron y 48 están desaparecidas en el oeste y el centro de Japón debido a las lluvias torrenciales caídas en los últimos días, informó ayer la emisora pública NHK, que añadió que hay más de 1,6 millones de personas que han sido evacuados de sus hogares. La mayoría de los fallecidos, sobre todo en Hiroshima y Ehime, fueron arrastrados por las crecidas de los ríos, cayeron accidentalmente a sus aguas o se vieron sorprendidos en sus viviendas por aludes de tierra y la subida del nivel del agua.La prefectura de Gifu (centro del país) es la única que sigue en alerta máxima.

La Agencia Meteorológica de Japón insistió en efectuar varias advertencias especiales en tres prefecturas de la isla principal de Honshu y alertó sobre más deslizamientos de tierra, crecidas de ríos y fuertes vientos durante unas tormentas que calificó de «históricas». Japón no vivía un desastre así desde agosto de 2014, cuando 77 personas murieron en Hiroshima.