Meses después de la operación Margen Protector en Gaza --la ofensiva israelí que causó casi 2.200 muertos y más de 11.000 heridos entre la población palestina--, un hospital de la capital de la Franja funciona a pleno rendimiento. Al menos, así lo perciben sus beneficiarios, que encuentran en el personal médico el soporte necesario e indispensable para afrontar la dureza de su vida cotidiana.

El Centro de Polio y Miembros Artificiales de Gaza, abierto en 1974 y en funcionamiento gracias al apoyo técnico de la Cruz Roja Internacional, es el único que facilita prótesis gratuitas y servicios ortopédicos a los heridos que perdieron algún miembro durante los 50 días que duró la operación militar del pasado verano.

Hombres mayores, jóvenes e incluso niños, como Osama al-Batsh (31 años) o Shareef al-Namla (3), han conseguido una pierna ortopédica y aprendido a utilizarla en este centro, como se puede observar en las imágenes, tomadas esta misma mañana en Gaza. Un soplo de optimismo en su particular tragedia personal.