Cuatro periodistas, entre ellos el británico Graham Phillips, corresponsal de la televisión rusa "Russia Today", y el ruso Vadim Axiónov, colaborador de la agencia de noticias "Anna-News", desaparecieron esta madrugada en la ciudad de Donetsk, en el conflictivo este de Ucrania.

"Cuatro periodistas (...) que se encontraban en zona de combates en el este de Ucrania desaparecieron en la noche del 22 al 23 de julio. Según datos disponibles, han sido hecho prisioneros por las fuerzas ucranianas", denunció el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, en una nota publicada en su web. Además de Phillips y Axiónov, han desaparecidos dos operadores de cámara que les acompañaban.

Los cuatro periodistas fueron vistos por última vez sobre las 23.00 hora local cuando grababan a unos 100 metros de las posiciones del Ejercito ucraniano en el aeropuerto de Donetsk, escenario de combates entre las tropas de Kiev y los separatistas en los últimos dos días. Unas dos horas más tarde, Phillips contactó por última vez con la redacción de "Russia Today" en Moscú, a la que envió un mensaje SMS en el que escribió "All is fine" (todo va bien).

Desde entonces, el canal de información internacional ruso que emite en varios idiomas (inglés, español y árabe) no ha podido contactar con el británico. Las autoridades de Kiev, al conocer la noticia, negaron que los periodistas desaparecidos se encuentren en su poder. "No tenemos ninguna información acerca de este periodista (Graham Phillips). Los militares ucranianos no secuestran a periodistas", dijo en Kiev el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania, Andréi Lisenko.

Igualmente, los milicianos prorrusos aseguraron no conocer el paradero de los desaparecidos y se mostraron seguros de que los cuatro han sido detenidos por las fuerzas de Kiev. "Los más seguro es que haya sido detenidos por los militares ucranianos", dijo a las agencias rusas el jefe de prensa de los milicianos, Konstantín Knírik.

Phillips, de 35 años, ya pasó dos días detenido por las fuerzas ucranianas tras ser arrestado el pasado 20 de mayo por la Guardia Nacional de Ucrania en un puesto de control cerca de Mariupol, puerto en el mar de Azov, en la región de Donetsk. Según relató él mismo tras ser liberado, fue trasladado a Kiev para ser interrogado en las dependencias del Servicio de Seguridad de Ucrania sobre el objeto de su estancia en el país.