La organización Human Rights Watch (HRW) ha denunciado decenas de casos de ataques policiales contra periodistas y médicos durante los violentos disturbios registrados en el centro de Kiev entre el 19 y 22 de enero.

En un comunicado publicado en su página web, HRW informa de que "ha documentado 13 de los casos" de represión policial "con el uso de porras, balas de goma y granadas aturdidoras", mientras que otras ONG ucranianas han registrado alrededor de 60 casos de este tipo.

La mayoría de esos ataques tuvieron lugar durante los disturbios en la calle Grushevski el 19 de enero y a pesar de que todos los periodistas llevaban acreditaciones de prensa y cámaras, según la organización internacional.

"Es posible herir a un periodista o un médico por descuido durante enfrentamientos con violencia, pero no a decenas", aseguró la subdirectora de programas y emergencias de HRW, Anna Neistat, de visita en Kiev.

"La policía afrontó serios desafíos durante los disturbios pero no es excusa para ataques premeditados contra reporteros y médicos ni para no haber tomado precauciones y protegerles", agregó.

Las protestas opositoras estallaron en Kiev hace poco más de dos meses después de que el presidente ucraniano, Víktor Yanukóvich, aplazara la firma del Acuerdo de Asociación con la Unión Europea prevista para fines de noviembre del año pasado.

Ante las crecientes manifestaciones europeístas en el centro de Kiev, ocupado por la oposición, la mayoría parlamentaria oficialista aprobó el pasado día 16 una serie de leyes para restringir el derecho de reunión y otras libertades civiles.

Tres días después, se registraron en la capital violentos choques entre manifestantes y policías antidisturbios que causaron varios muertos -seis, según la oposición; tres, de acuerdo con la versión oficial- y centenares de heridos.