El proceso para juzgar políticamente a Donald Trump en el Congreso de Estados Unidos sigue avanzando con rapidez y paso firme. La mayoría demócrata en la Cámara Baja ha presentado este martes los artículos del impeachment, el equivalente a los cargos que se imputarán al presidente: abuso de poder y obstrucción al Congreso.

El primero está relacionado con las presiones de Trump a Ucrania para investigase a su rival político Joe Biden, unas maniobras en las que el presidente habría puesto sus intereses personales por encima de los intereses nacionales del país, según han explicado los demócratas durante las audiencias de las últimas semanas en el Congreso. El segundo responde al veto impuesto por la Casa Blanca a los altos cargos de la Administración para evitar que testificasen durante esta primera fase del impeahment, así como su rechazo a entregar los documentos requeridos por el Congreso.

Los demócratas planean votar esta misma semana ambos artículos en el Comité Judicial de la Cámara de Representantes y refrendarlos la semana siguiente en el pleno de la Cámara Baja, lo que servirá para abrir oficialmente el proceso de destitución. El juicio político en el Senado comenzaría después de las vacaciones de Navidad. "El presidente se puso a sí mismo por delante del país", dijo la víspera Jerry Nadler, el presidente demócrata del Comité Judicial, el organismo encargado de redactar formalmente los cargos. "El presidente dio la bienvenida a la interferencia extranjera en las elecciones del 2016, la exigió en las elecciones del 2020 y ahora le han cogido". Nadler insistió en que Trump representa "un claro y continuo peligro para el país".